La pila de carne de la foto es el sándwich Woody Allen que
sirven en el Carnegie Deli, uno de esos locales donde los cinéfilos tontainas
vamos a picar boleto, como los musulmanes a la Meca. Allen hizo una
divertidísima comedia sobre el mundo del espectáculo y la mafia, Broadway Danny
Rose, y utilizó como localización base este garito de la Séptima avenida. Los
dueños del bar, para responder al detalle, bautizaron esta mastodóntica
composición de pastrami, pan y mostaza con el nombre del director judío. Pedid
uno para dos personas y apuesto a que no seréis capaces de acabar con él.
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